Crisis climática: las lluvias descontroladas ponen en jaque a Bolivia
- generacionesperanz5
- 25 nov
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Publicado: 25/11/2025
Redacción AJNAB: Equipo de organización
Foto: REUTERS/Ipa Ibanez - Infobae
Las lluvias intensas, agravadas por el cambio climático, están afectando gravemente a las poblaciones más vulnerables de Bolivia, especialmente en regiones como La Chiquitanía, la Amazonía y el Chaco.
Estos fenómenos generan inundaciones, deslizamientos y pérdidas agrícolas que afectan la seguridad alimentaria y la disponibilidad de agua, aumentando la vulnerabilidad social y económica de comunidades en situación de pobreza.
Impacto del cambio climático en los patrones de lluvia
Los efectos del cambio climático se traducen en un aumento hasta del 80% en la variabilidad de las lluvias, con temporadas más concentradas y extremas en Bolivia. Esto implica tanto episodios de lluvias intensas que causan inundaciones como períodos de sequías prolongadas, afectando la continuidad de los ciclos productivos y biodiversidad.
Las cuencas Amazónica, del Plata y de los Andes experimentan déficits hídricos importantes, con impactos sobre la generación hidroeléctrica y la disponibilidad de agua para consumo humano y riego.
Por otra parte, más de dos millones de niñas, niños y adolescentes viven en zonas donde el cambio climático limita severamente su capacidad de adaptación a sequías extremas, inundaciones y pérdida de servicios básicos, además de afectar desproporcionadamente a comunidades rurales ligadas a actividades agropecuarias, propiciando la migración interna, la desnutrición infantil y la reducción en el acceso a alimentos.
Consecuencias sociales y económicas
Las lluvias intensas recientes en regiones como Santa Cruz, Cochabamba y La Paz han provocado daños significativos en viviendas, infraestructuras y cultivos, desplazando a miles de familias y generando emergencias humanitarias, ya que el deterioro en la producción agrícola afecta también la seguridad alimentaria y las fuentes de ingreso incrementando como consecuencia la pobreza y la desigualdad.
Por eso, las políticas de adaptación deben incluir también a la niñez y adolescencia tomando en cuenta aspectos como el enfoque de género para reducir brechas y recibir financiamiento climático directo. La gestión integrada del riesgo y la promoción de resiliencia en las comunidades más afectadas son claves para enfrentar estos desafíos que el cambio climático le genera a Bolivia.
Este panorama evidencia que las lluvias extremas y la crisis climática están estrechamente ligadas, poniendo en riesgo a las poblaciones más vulnerables del país, exigiendo respuestas integrales y oportunas para mitigar impactos y adaptarse a un clima cada vez más variable y adverso.
AJNAB - Agencia Juvenil de Noticias Ambientales Bolivia
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